El 29 de febrero será una fecha importante para mi persona. El año bisiesto no representa más que el facilismo y comodidad del terrícola promedio; para quienes no prestaron atención en ciencias de la tierra, el día dura aproximadamente 24 horas, sin embargo, para no tener relojes digitales que en vez de marcar 00:00 nos dieran las 23:56, decidieron aproximarlo a 24 y, los minutos sobrantes, acumularlos en un día que aparecería cada 4 años.
Era una linda mañana de miércoles cuando una despreocupada Angela, acompañada de varios compañeros de clases, esperaba a que Marmota Man hiciera acto de presencia e iniciara la tercera y última rotación de mi semestre 12: psiquiatría. Habia soportado muy bien a la muchedumbre y su respectivo bullicio hasta que alguien considero acertado comentar lo siguiente:
Es que si comenzamos la próxima semana entonces serán seis semanas exactas, y apenas terminemos psiquiatría, iniciamos el último año… no tendremos descanso
“Click” fue el sonido que escuché, antes de que una voz vieja y bien conocida empezara a hablarme. Mi SuperYo, con su típico tono de reprimenda, comenzó el discurso diseñado idealmente para esta ocasión: ¿ESTÁS ESCUCHANDO ESO? FALTA POCO PARA QUE TERMINE EL MES Y FÍJATE EN TODAS LAS CUESTIONES PENDIENTES DE TU LISTA DE OBLIGACIONES PARA FEBRERO, TE ESTÁS DURMIENDO Y LUEGO TE VAS A ARREPENTIR, EMPIEZA A TRABAJAR. Y eso fue todo, “click”.
Mi SuperYo tenía razón, en mi larga lista de pendientes todos tienen el mismo grado de importancia, así como también, el mismo porcentaje realizado poco menos de la mitad. En aquel pasillo caluroso y, atiborrado de gente que irradiaba más calor, una Angela alarmada sucumbía ante el colapso nervioso. Que Marmota Man nos concediera dos días libres [e iniciar el lunes] era mi suplica más importante, la cual el destino me concedió no sin antes agregar una nueva jugarreta
Y tienen que preparar el seminario de psicofármacos I para el lunes…
Apenas entré a mi casa, encendí la laptop y me sumergí en el apasionante mundo de mis obligaciones prorrogadas. Mis planes se centraban en trabajar toda la tarde, lamentablemente, Corpoelec tenía otros planes para mí. El reloj de mi celular marcaba las 13:08 cuando inicio un apagón que duró 12 HORAS...
Esperé por luz, asi como el dia anterior esperé demasiadas horas para ser cierto a que iniciará el examen final de cirugía III el cual, fue rodado ONE MORE TIME por razones que ya no me interesan analizar. No obstante, de la misma manera que invertimos el tiempo perdido de ese dia tomando fotos que aparecerán en el video de la promoción, yo decidí pasar mi tarde comprándole los regalos de cumpleaños a una persona que amo demasiado y cuya maravillosa humanidad me deslumbra dia tras dia: YO…
Con ese momento narcisista y acompañada de mis muchas responsabilidades con 29 de febrero como fecha tope, les digo see ya later!
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