Dentro de mis demasiados trastornos mentales, uno de los más resaltantes y con el que debo lidiar desesperadamente a diario es la obsesión. Obsesión, ideas persistentes, pensamientos, impulsos o imágenes que son experimentadas como intrusivas e inapropiadas y que causan marcada ansiedad o angustia.
Así soy yo, una mujer obsesionada con todo lo que la rodea, o al menos con todo aquello que me rodea capaz de causarme agonías si no es controlado. En la actualidad tengo dos obsesiones muy marcadas y casi imposibles de controlar, una de ellas MÍ tiempo. Las horas de mi existencia son algo que merecen respeto, no me gustan las esperas pues yo NO hago esperar a las personas, rechazo la impuntualidad y me vuela los tapones que te incluyan en planes en los que no estás dispuesta a perder tu tiempo.
Pero la gente no entiende eso de respetar el tiempo de los demás, en especial la gente de mi universidad, por lo que ese miércoles a las 8:20 am estaba parada en el sótano del hospital esperando la clase inaugural de pediatría II. ¿Dónde está la gente? En ningún lado, es que aparentemente en algún momento del transcurso entre noche del martes-mañana del miércoles alguien le dijo a alguien y ese alguien a otro alguien que le avisó a un alguien que las clases iniciarían el lunes. #Lovely
Serenity now pensé. Es pediatría II, vamos a tomarnos estas vacaciones, perdón, esta rotación con mucha calma y sobre todo PACIENCIA, porque recuerda que son niños tus nuevos pacientes y a ellos los protege la LOPNA. Decidí entonces pasar por el departamento porque casi 10 semanas después es hora de conocer mi nota final en perinatología. 9:30 am y ¿cerrado?, oh si, así es pediatría, un mundo maravilloso donde todos parecen estar vacacionando siempre. Subamos a 4to piso entonces, 3 semanas después -creo- es tiempo suficiente para tener una respuesta sobre el destino de mi anteproyecto. Nada por aquí, nada por allá. Media hora después avisté a lo lejos el cabello de Rosibel.
Angela, hoy no te traje el anteproyecto pero eso está aprobado ¿oíste?, eso ya está aprobado pero cambié de bolso y se me quedó, te lo doy la próxima semana, tranquila...
¿Ni un poquito de lidocaina para esa noticia tan emocionante? Creo que ni sonreí, solo me mantuve de pie, perpleja, confundida pero muy alegre. Gosh, las buenas noticias deberían darse de una manera más ¿romántica? Pero bueno, es una excelente noticia desde cualquier perspectiva que quiera ser vista.
Anteproyecto aprobado. Anteproyecto aprobado. Creo que aun no lo he asimilado. Anteproyecto aprobado. No le he dicho a mi tutor. Anteproyecto aprobado. Mis papás están completamente emocionados. Anteproyecto aprobado. Solo tengo 4 meses para armar la tesis. Anteproyecto aprobado. Es inevitable que aflore la fashionista que vive en mí y analice la situación de vestimenta para el día de la discusión. Anteproyecto aprobado. Que ladilla comunitaria. Anteproyecto aprobado. Parece que graduarme más que un sueño, es un hecho próximo (HOPE).
Escrito originalmente 24/06/2011
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